Un irrigador dental es un dispositivo eléctrico que utiliza un chorro de agua a presión para limpiar entre los dientes y a lo largo de la línea de las encías. Es una alternativa o complemento al hilo dental tradicional, y se utiliza principalmente para eliminar restos de comida y placa bacteriana en áreas de difícil acceso.

¿Por qué deberías usarlo?

Mejora la salud bucal: Ayuda a prevenir enfermedades de las encías, como la gingivitis, al eliminar bacterias y restos de alimentos.
Eficaz en zonas difíciles: Llega a lugares donde el cepillo o el hilo dental no pueden, como alrededor de aparatos de ortodoncia, coronas y puentes.
Suavidad: Es más suave y menos invasivo que el hilo dental, lo que lo hace ideal para personas con encías sensibles o problemas de movilidad en las manos.

¿Para qué sirve?

Eliminar la placa y bacterias entre los dientes.
Masajear las encías para mejorar la circulación sanguínea.
Limpiar de forma efectiva zonas alrededor de brackets o implantes dentales.